Mediante un comunicado difundido en el día de hoy por parte de Viviam Perrone, la presidenta de Madres del Dolor y Matias Bagnato, integrante del Observatorio de Víctimas de la Cámara de Diputados, dieron a conocer su descontento en torno al fallo de la Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires que revoca la resolución del Habeas Corpus colectivo que liberaba a decenas de internos del sistema penitenciario.
“…los jueces recibieron condiciones para poder decidir si a cada preso le corresponde obtener el beneficio de prisión domiciliaria, condiciones que tienen que ver con el sentido común como lo es el considerar la gravedad del delito, si hay riesgo de fuga o si hay algún otro medio alternativo dentro de las cárceles. Evidentemente, para algunos jueces que con tanta liviandad otorgan prisiones domiciliarias a violadores y homicidas, su sentido no es el común de la sociedad.” menciona el comunicado.
Quienes suscriben el comunicado, y vale mencionar una gran cantidad de víctimas y familiares de víctimas a los que representan, consideran que ha quedado “sabor a poco”: “¿qué va a ocurrir con quienes ya gozan de este beneficio? ¿Por qué no se consideran nulas si no se cumplió con la Ley de Víctimas? ¿Ya se pensó en ofrecer atención psicológica a las víctimas que viven con el violador o asesino a pocas cuadras? ¿Ya se vio como controlar a estos reclusos que no terminaron sus sentencias?”, se preguntan.
Comunicado completo:
“Sabor a poco
Las víctimas leímos la resolución de la Corte Suprema de Justicia de la Pcia de Buenos Aires y nos hemos quedado con sabor a poco.
En esta resolución, los jueces recibieron condiciones para poder decidir si a cada preso le corresponde obtener el beneficio de prisión domiciliaria, condiciones que tienen que ver con el sentido común como lo es el considerar la gravedad del delito, si hay riesgo de fuga o si hay algún otro medio alternativo dentro de las cárceles. Evidentemente, para algunos jueces que con tanta liviandad otorgan prisiones domiciliarias a violadores y homicidas, su sentido no es el común de la sociedad.
En el mes de enero leímos como la Comisión por la Memoria (que no trabaja para la Memoria de las víctimas) proponía al gobernador Kicillof liberar entre 10 mil y 15 mil presos solo de las cárceles bonaerenses. Las puertas se abrieron hasta que las víctimas alzamos nuestras voces. No se cumplía con los derechos básicos de informar y escuchar a las víctimas. La sociedad toda acompañó a nuestro reclamo y solo entonces, se dignaron a oír (todavía no escucharon).
Ahora, resueltos a trabajar, se están encontrando métodos alternativos para resolver el problema de hacinamiento en las cárceles que existe desde hace décadas. Esto es lo que pide la resolución de la Corte Bonaerense.
Pero, ¿qué va a ocurrir con quienes ya gozan de este beneficio? ¿Por qué no se consideran nulas si no se cumplió con la Ley de Víctimas? ¿Ya se pensó en ofrecer atención psicológica a las víctimas que viven con el violador o asesino a pocas cuadras? ¿Ya se vio como controlar a estos reclusos que no terminaron sus sentencias?
Las víctimas seguimos gritando para que realmente nos “escuchen”.
Esperamos que cuando termine la pandemia, los jueces que con tanta liviandad utilizaron sus lapiceras para beneficiar a violadores y asesinos, las vuelvan a usar para que regresen a las cárceles y si no los encuentran, o lo que es peor aún, nuevamente ultrajaron la vida de alguien, serán los jueces los culpables.
Viviam Perrone, mamá de Kevin Sedano
Matias Bagnato, tragedia de Flores”
Viviam Perrone, mamá de Kevin Sedano
Matias Bagnato, tragedia de Flores”