El retiro de Gendarmería del barrio La Cava surgió a partir de una denuncia contra algunos efectivos en el inicio de la cuarentena. Esta situación concluyó en una causa judicial y así la actividad de los gendarmes se vio afectada e interrumpida. Ahora, vecinos y ONG que trabajan y son de La Cava, además de desmentir los hechos por los cuales se realizó la denuncia, pidieron, de la mano de la Municipalidad sanidrense, que la fuerza vuelva a patrullar el barrio.
En la reunión que se efectuó esta mañana para que Gendarmería Nacional volviera a operar, asistieron: el intendente de San Isidro, Gustavo Posse; el subsecretario de Intervención Federal del Ministerio de Seguridad de la Nación, Luis Morales; y vecinos del barrio en cuestión. El pedido fue realizado al Ministerio de Seguridad de la Nación, que se encuentra a cargo de Sabrina Frederic.
“Nos reunimos con los vecinos y entidades que trabajan en distintos puntos de La Cava para conversar y presentar el nuevo sistema de recorridas de la fuerza. Nuestro objetivo es optimizar la seguridad en el barrio pero también colaborar en el cuidado y prevención sanitaria de los vecinos”, indicó Gustavo Posse.
Los gendarmes que patrullarán por las calles internas de La Cava serán 200, quienes también van a colaborar con operativos de Salud y acción social. Luis Morales amplió: “La intención es intensificar los patrullajes en las paradas de colectivos y en las arterias más importantes. Además, coordinar con Municipio, Provincia y Nación, distintas acciones para acompañar otros operativos ya sean de salud o desarrollo social”.
Elsa Espinoza, quien integra Cava en Red (el espacio de participación e integración construido hace años), expresó que “ya habíamos tenido la experiencia con Gendarmería y nos sirvió porque nos dio más seguridad y podíamos salir sin miedo. Estoy contenta con esta reunión y la decisión de rediseñar y planificar nuevamente la presencia de esta fuerza”.